domingo, 15 de agosto de 2010

La paradoja de Internet: + = -

Si hay alguien que merece ser escuchado ese es sin duda Eduard Punset. Sus temas son tan actuales y tan fácilmente extrapolables a cualquier área de la vida, que merece la pena seguirle de cerca.

Y es que como dice Barry Schwartz (Psicólogo Swarthmore College) nos pasamos la vida buscando, pero buscando el qué?. Pues puñados de felicidad que nuestra sociedad actual nos vende en formatos paquetizables( maxi, mini, individual, familiar...,) en fin pequeñas píldoras de felicidad que duran escasos segundos.
Pues según Barry, hemos asociado la variedad, la posibilidad de elección en el parangón o baluarte de la propia libertad.

La palabra Libertad ocupa el mismo lugar que Elección
.

¿Por qué esta necesidad de un abanico cada vez más amplio de opciones?. Las personas necesitamos ser los autores de nuestra propia vida, de nuestra propia existencia y es a través de la posibilidad de elegir entre múltiples alternativas lo que nos hace pensar que controlamos nuestra existencia, que somos seres resolutivos como demanda una sociedad competitiva.

Pero claro, tanta libertad parece que tiene repercusiones que se reflejan en el sentir de toda una sociedad, de esta y nuevas generaciones. Tenemos tanto que decidir diariamente que nos sentimos agotados, se nos esfuma la vida ante tanta elección. Somos animales sociales, necesitamos tiempo para hacer nuevos amigos, para enamorarnos, para estar en familia, con los amigos pero como dice Barry Schwartz, el tiempo se esfuma ante tanta avalancha de opciones.

Si extrapolamos todo esto a cualquier aspecto de nuestra vida, observo que de lo que hablan Barry y Punset es de auténticas realidades, de múltiples opciones, de grandes insatisfacciones, de una concepción del mundo que ha de revisarse...
La alternativa que Barry Schwartz nos ofrece, no es buscar lo mejor sino algo que sea lo suficientemente bueno. Es cierto que hay muchas posibilidades fuera pero desde luego, no hay porque contemplarlas todas.

Creo que en esta hipótesis que lanza Barry sobre el porqué de tanta insatisfacción, soledad y tristeza que parece está ahondando en las sociedades actuales, un ejemplo clarificador y un termómetro exacto es el elevado número de divorcios y el escaso compromiso de las personas en su vida personal y profesional.

Pero llevándolo al terreno que me interesa, observo que trabajando en un medio como Internet, uno quiere controlarlo todo, estar en todas las conversaciones, no perder el hilo de lo que sucede con nuestra marca o reputación online. Queremos ser capaces de subsanar cualquier error en tiempo real, participar y ser parte integrante de un medio que cada día se impone con más fuerza y que empieza a tenerse en cuenta en las estrategias de marketing de empresas punteras..

Internet es un claro ejemplo de estas múltiples opciones que a los ojos de las marcas se presentan como la nueva medicina ante la crisis. Aunque por supuesto creo firmemente en el potencial de este maravilloso medio, también pido a las marcas cierto sosiego a la hora de pedirnos resultados inmediatos así como alejarles de cualquier indicio de cruzada por conquistar estos nuevos países, Facebook, Tuenti y demás redes.
Dejemos de lado a las empresas Maximizadoras (nunca se sienten satisfechas con sus decisiones) y aboguemos por las compañías y marcas Satisfactoras (aquellas con un grado de satisfacción óptimo). Porque como apunta Barry a veces, mas es igual a menos.

Barry también señala una cierta ingenuidad en los jóvenes al no creerse influenciados por las marcas... Nos pasamos gran parte de nuestra tiempo decidiendo que marcas son las óptimas y cuales son las que mejor se adaptan a nuestras necesidades. No somos inmunes al consumismo, "Consumo luego existo". Medimos nuestra felicidad por lo que tenemos, por lo que consumimos...una auténtica carrera en probar todo lo trendy, todo lo que aparece en el mercado. Queremos ser pioneros, early adopter y que las marcas no nos encasillen en el grupo de usuarios rezagados o tardíos. De esto sabe mucho la telefonía móvil...

Pero todo esto tiene sus consecuencias: hemos dejado de lado nuestras emociones, hemos olvidado nuestros instintos más primitivos, hemos dejado de ser auténticos ciudadanos, desconocemos los códigos de conducta, y la ética y la moral se convierten en algo subjetivo...!!

Barry termina diciendo que la educacion no funciona, "el sistema educativo tiene que aportar no sólo haciendo tecnócratas sino apuntando al corazón, creando verdaderos ciudadanos".

Estoy totalmente de acuerdo con él, pero también hago una apuesta por Internet porque tiene mucho que aportar, es un medio perfecto para crear valor en las personas. Ya ha empezado a hacerlo creando códigos de conducta en las redes sociales, en los foros, blogs, sites...

Internet se asemeja a un conjunto de pequeñas ciudades digitales en un mundo globalizado con una sociedad líquida que empieza a tomar consistencia en esta vasta e imperante red.

Disfruta del video en Redes para la ciencia y en "Barry Schwartz sobre la paradoja de elegir" en ted.


2 comentarios:

  1. Buenísimo post, Rocío. La verdad es que hacía falta que alguien lo dijera finalmente, alto y claro: ¡no hay tiempo material para abarcar tanta avalancha de información! Gracias por los links a los vídeos, me encantan Punset y el TEd!

    Andrea

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  2. Gracias Andrea, me alegra que te haya gustado. Yo también soy fan de Punset y de TEd como ves...Saludos

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